19 de Junio del 2012 - 10 PM
La diputada Gladys Requena (Psuv-Vargas) presentó la propuesta ante la Plenaria, en la cual explicó que el pueblo Pemón lleva 15 años de lucha para que se concrete la devolución de esta reliquia que ahora está en manos del artista plástico alemán, Wolfang von Schwarzenfeld.
Este artista extranjero se llevó la piedra sagrada en el año 1998, luego de firmar un acuerdo con el gobierno de Rafael Caldera. Esta piedra de jaspe forma parte de la instalación escultórica denominada Global Stone en el parque metropolitano Tiergarten, en Berlín, Alemania.
Con un peso de 30 toneladas, es una de las reliquias ancestrales más importantes del pueblo pemón, asentado en La Gran Sabana.
Durante su intervención, la legisladora Gladys Requena aseguró que este pueblo indígena está amparado por la Constitución Nacional, por lo que su reclamo es válido y justo.
"Fue una evidente violación a las leyes y creencias pemonas. Está en un parque donde hay cinco piedras que representan a los continentes. Kueca es para los pemones, la abuela sabia y sagrada que orienta a su pueblo en todo lo relacionado con el presente, pasado y futuro, lo que significa un bien preciado y de incalculable valor para la cultura de este pueblo", manifestó la vicepresidenta de la Comisión de Cultura y Recreación.
Requena enfatizó que el pueblo pemón considera la lejanía de la piedra como la causa de los fuertes cambios meteorológicos del país. "Se genera desequilibrio por la alteración de sus componentes", añadió.
Por su parte, el único diputado pemón de la AN, José Luis González, explicó que la importancia de la piedra para su pueblo es tan grande que simboliza la interculturalidad y la alianza entre las distintos pueblos.
Resaltó que la piedra fue sacada de Venezuela con el apoyo de los gobiernos puntofijistas, por eso en Revolución los pueblos indígenas confían en el Presidente Hugo Chávez, para que se resuelva satisfactoriamente este caso.
"Agradezco a todos los venezolanos y venezolanas que se solidarizan con el pueblo pemón", sentenció.
En tal sentido, los diputados y diputadas acordaron apoyar al pueblo pemón en su justa lucha por la repatriación de la piedra de la abuela Kueca y su devolución al sitio de origen en Santa Cruz de Mapaurí, Parque Nacional Canaima.
Además, exhortaron al Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores, a que realice las gestiones pertinentes ante el gobierno alemán para la repatriación de este bien patrimonial.
Igualmente, los asambleístas solicitaron al Ejecutivo a abrir una investigación sobre los hechos y personajes que permitieron el proceso de extracción de este bien patrimonial y aprobaron designar una comisión de diputados y diputadas para que hagan entrega del acuerdo al pueblo pemón, así como publicar el documento debatido en Plenaria.
Vale destacar que en la mitología pemona, Kueka es una sabia anciana, protectora del pueblo y dadora de alimentos que fue convertida en piedra, en su juventud, por escaparse con un hombre de la familia Taurepán. Por ser de la familia Mucuschí, estaba prohibido para la joven enamorarse de un muchacho de un grupo distinto, tal como lo establece la normativa indígena.
Como castigo, ambos jóvenes fueron convertidos en piedra, por el padre de Kueka, colocados a pocos kilómetros de la comunidad de Santa Cruz de Mapurí, en el municipio Gran Sabana del estado Bolívar, y desde entonces han sido reconocidos por el pueblo ancestral como la Abuela y el Abuelo Kueka.
Se tiene previsto que el próximo 21 de junio, unos 3.000 habitantes de la comunidad indígena pemona entreguen a la Embajada de Alemania un documento expositivo sobre el valor simbólico-ancestral que tiene la roca de jaspe para la etnia venezolana.
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